Gabriel Mercedes fue despojado del oro en China
Roberto Beltrán presidente Taekwondo de México confirmo en entrevista que años atrás realizaron cena con jueces y federativos internacionales y que dieron un millón de pesos para el campeonato juvenil y realizar trabajo diplomática con jueces en los juegos de china 2008.
Por José Luís Paulino
Cuando el Secretario de Deportes (Felipe Payano), ofreció las declaraciones que el señor Vásquez Raña había influido para que el mexicano Guillermo Pérez ganara la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de China al dominicano Gabriel Mercedes, estaba en lo cierto, ya que los mexicanos hicieron una serie de amarres que garantizaron esta medalla para su peleador, donde se incluyó un millón de pesos, cena y trabajo diplomático con los jueces.
Inmediatamente “el Genio del Mal” Vásquez Raña, salio al frente con sus declaraciones que no tuvo nada que ver en ese combate. Que el Secretario Felipe Payano estaba mintiendo y exagerando sobre la pelea donde el mexicano Pérez fue el ganador, rechazando que se favoreciera al michoacano.
La novela terminó ahí, sin pasar mayores resultados y los dominicanos festejamos su llegada con un pomposo desfile para estos notables campeones, ahora resulta que no solo el señor Raña influyó en Beijing, los federados mexicanos, también invirtieron un dineral para comprar a los jueces que estuvieron en los juegos.
Ramonetti confirmo que Carlos Hermosillo comento al terminar la pelea “Vamos a ver si funcionó”, en referencia al trabajo político que se hizo, donde Conade puso el dinero para llevar a cabo las invitaciones. El propio presidente de la federación mexicana de Taekwondo Roberto Beltrán Pérez, ofreció las declaraciones al diario La Afición de México, que invirtieron un millón de pesos para ganar la sede del campeonato juvenil de la disciplina y para realizar una labor diplomática con los jueces.
“La Inversión era para conseguir el campeonato mundial juvenil y aprovechando eso realizamos la estrategia de crear el ambiente positivo a favor de México, con la cena a ellos pero nunca le pagamos dinero a un juez para que nos ayudara en la Olimpiada y ni a uno de ellos le pedimos ayuda en ese aspecto” mencionó Ramonetti vía telefónica.
Conociendo la influencia del “Genio del Mal” Vásquez Raña, y leyendo las diferentes declaraciones del flamante presidente de la federación mexicana de Taekwondo (Roberto Pérez), nos podemos dar cuenta que las afirmaciones del ex presidente cubano Fidel Castro y del propio Payano, sobre la mafia del arbitraje llega a extremos increíbles para perjudicar a los países más pequeños especialmente a los latinos.
Para castro el arbitraje esta corrompido y muy comprometido y avanzó que para los próximos juegos allí habrá chovinismo europeo, corrupción arbitral, compra de músculos y cerebro, costo impagable y una fuerte lucha de dosis de racismo.
Y ahora cuando todavía reflejamos esa medalla de Gabriel Mercedes, claro el oro, y no la plata que trajo, dentro del grupo de referís a los que invitaron los mexicanos a cenar, dos que estuvieron en las esquinas en esa final, y que dieron su decisión sobre el ganador estaban en esa ocasión y comieron de un gran banquete ofrecido exclusivo para el grupo de árbitros del Taekwondo.
Siempre hemos destacados que en estos juegos Olímpicos, los intereses de los grandes sopesan demasiado y que no importa el esfuerzo de jóvenes que vengan de los extractos más humildes de países como el nuestro, que se queden sin una medalla por el vandalismo que reina en estos eventos que muchas veces refleja la podredumbre en la que se encuentra la humanidad, y los que hacen los ricos para ganar una medalla al precio que sea para decir somos los mejores.
Aunque ellos (el michoacano Guillermo Pérez y su entrenador, José Luís Onofre), dicen estar tranquilos ante estas declaraciones del presidente de la federación mexicana de Taekwondo, nuestro Gabriel Mercedes y el pueblo dominicano estamos contentos porque sabemos que el ganó en buena lid su medalla, pero el mexicano sabe que ese millón de pesos y ese trabajo de los suyos fue el queso utilizado para envolver a esos corruptos que por tan poca miseria vendieran su honor y el lleve sobre su pecho un oro que no es suyo, un oro falso que pertenece a Gabriel Mercedes y a todos los dominicanos.
Cuando el Secretario de Deportes (Felipe Payano), ofreció las declaraciones que el señor Vásquez Raña había influido para que el mexicano Guillermo Pérez ganara la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de China al dominicano Gabriel Mercedes, estaba en lo cierto, ya que los mexicanos hicieron una serie de amarres que garantizaron esta medalla para su peleador, donde se incluyó un millón de pesos, cena y trabajo diplomático con los jueces.
Inmediatamente “el Genio del Mal” Vásquez Raña, salio al frente con sus declaraciones que no tuvo nada que ver en ese combate. Que el Secretario Felipe Payano estaba mintiendo y exagerando sobre la pelea donde el mexicano Pérez fue el ganador, rechazando que se favoreciera al michoacano.
La novela terminó ahí, sin pasar mayores resultados y los dominicanos festejamos su llegada con un pomposo desfile para estos notables campeones, ahora resulta que no solo el señor Raña influyó en Beijing, los federados mexicanos, también invirtieron un dineral para comprar a los jueces que estuvieron en los juegos.
Ramonetti confirmo que Carlos Hermosillo comento al terminar la pelea “Vamos a ver si funcionó”, en referencia al trabajo político que se hizo, donde Conade puso el dinero para llevar a cabo las invitaciones. El propio presidente de la federación mexicana de Taekwondo Roberto Beltrán Pérez, ofreció las declaraciones al diario La Afición de México, que invirtieron un millón de pesos para ganar la sede del campeonato juvenil de la disciplina y para realizar una labor diplomática con los jueces.
“La Inversión era para conseguir el campeonato mundial juvenil y aprovechando eso realizamos la estrategia de crear el ambiente positivo a favor de México, con la cena a ellos pero nunca le pagamos dinero a un juez para que nos ayudara en la Olimpiada y ni a uno de ellos le pedimos ayuda en ese aspecto” mencionó Ramonetti vía telefónica.
Conociendo la influencia del “Genio del Mal” Vásquez Raña, y leyendo las diferentes declaraciones del flamante presidente de la federación mexicana de Taekwondo (Roberto Pérez), nos podemos dar cuenta que las afirmaciones del ex presidente cubano Fidel Castro y del propio Payano, sobre la mafia del arbitraje llega a extremos increíbles para perjudicar a los países más pequeños especialmente a los latinos.
Para castro el arbitraje esta corrompido y muy comprometido y avanzó que para los próximos juegos allí habrá chovinismo europeo, corrupción arbitral, compra de músculos y cerebro, costo impagable y una fuerte lucha de dosis de racismo.
Y ahora cuando todavía reflejamos esa medalla de Gabriel Mercedes, claro el oro, y no la plata que trajo, dentro del grupo de referís a los que invitaron los mexicanos a cenar, dos que estuvieron en las esquinas en esa final, y que dieron su decisión sobre el ganador estaban en esa ocasión y comieron de un gran banquete ofrecido exclusivo para el grupo de árbitros del Taekwondo.
Siempre hemos destacados que en estos juegos Olímpicos, los intereses de los grandes sopesan demasiado y que no importa el esfuerzo de jóvenes que vengan de los extractos más humildes de países como el nuestro, que se queden sin una medalla por el vandalismo que reina en estos eventos que muchas veces refleja la podredumbre en la que se encuentra la humanidad, y los que hacen los ricos para ganar una medalla al precio que sea para decir somos los mejores.
Aunque ellos (el michoacano Guillermo Pérez y su entrenador, José Luís Onofre), dicen estar tranquilos ante estas declaraciones del presidente de la federación mexicana de Taekwondo, nuestro Gabriel Mercedes y el pueblo dominicano estamos contentos porque sabemos que el ganó en buena lid su medalla, pero el mexicano sabe que ese millón de pesos y ese trabajo de los suyos fue el queso utilizado para envolver a esos corruptos que por tan poca miseria vendieran su honor y el lleve sobre su pecho un oro que no es suyo, un oro falso que pertenece a Gabriel Mercedes y a todos los dominicanos.
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