RD, 46 del mundo y octavo de América
Una medalla de oro y otra de plata dieron al país la mejor actuación en su historia olímpica
SANTO DOMINGO. Cuando el presidente del Comité Olímpico Dominicano (COD) dijo a DL la semana pasada que la histórica actuación criolla en las Olimpíadas que concluyeron ayer, no fue al azar, prácticamente no encontró oposición.
Previo al inicio del máximo evento deportivo global, Luisín Mejía advirtió que, "romper la barrera de las medallas", era la meta y agregó que, "se acabó la era de ir a participar, vamos a competir, no importa cuál sea el resultado, llevamos atletas del primer nivel".
Y la historia le dio la razón. El puesto 46 que ocupó el país en China representa un avance de 10 casillas con respecto a Atenas, donde el oro de Félix Sánchez salvó la participación.
A Beijing, la delegación quisqueyana llevó un menudo de atletas en capacidad de pelear por los metales en disputas.
Sólo Brasil, Cuba, México y Argentina quedaron por encima de Dominicana en el medallero entre los países latinoamericanos. A nivel continental, el país llegó en el octavo puesto. Naciones como Portugal, Irán, India, Suecia, Grecia (que albergó las Olimpíadas en 2004), Israel, Colombia, Chile, Venezuela y Taiwán, tuvieron un rendimiento por debajo al dominicano.
El oro del boxeador superligero (64 kilos) Félix Manuel Díaz Guzmán, primero que en su ficha de manufactura (pasaporte) dice Hecho en República Dominicana, y la plata del taekwondoíne Gabriel Mercedes (58 kilos) es el resultado de una generación de atletas salidos de un sistemas que, aunque genera cuestionamientos, garantiza un trato que dista de los días de concentraciones a semanas de competencias.
Nunca cuatro boxeadores habían avanzado a octavos de final, nunca una pesista había llegado en el quinto lugar, ni una tenimesista había llegado a cuartos de final. De los 25 atletas que llevó el país apenas uno (Mariely Sánchez, atletismo) llegó por invitación, el resto tuvo que ganarse su clasificación.
La promulgación de la Ley 85-99 que crea el Programa de Atletas de Alto Rendimiento, Nuevos Valores e Inmortales (PARNI) y la implementación por parte del ex secretario de Estado de Deportes, César Cedeño (2000-2004), de asignaciones fijas de recursos a las federaciones, dio un giro de 180 grados al deporte aficionado dominicano.
Ambas decisiones han sido tan acertadas que los partidos Revolucionario Dominicano (PRD) y de la Liberación Dominicana (PLD) aprobaron y fortalecieron lo que uno y otro hizo. El presupuesto de Deportes que corre este año superará los RD$2,300 millones, seis veces lo que se invertía en 1998.
Así, las cancelaciones de participaciones en eventos internacionales está reservado para un puñado de federaciones que no terminan de aplicar los principios de la gerencia, pues cada mes reciben asignaciones fijas.
Desde 1999, los atletas dominicanos de alto rendimiento y nuevos valores gozan de alimentación de primera calidad, seguro médico (que incluye a tres familiares), facilidades de estudio, además de alojamiento, puesto que las concentraciones son permanentes. En la actualidad hay 853 atletas activos que gozan de estos privilegios y otros 700 ex deportistas.
Soterio Ramírez, actual director del PARNI, reveló que en los últimos cuatro años este programa ha otorgado 1,048 becas universitarias, ya que estar registrado en un centro de estudios es un requisito para estar en el esquema.
Las medallistas panamericanas Gina María Ruiz (taekwondo), Wanda Rijo (halterofilia) y Heidy Rodríguez (karate) son ejemplos del nuevo sistema. Ninguna de las tres llega a los 30 años, son profesionales y ya abandonaron la actividad.
Los atletas protegidos por el PARNI devengan sueldos que van entre RD$5 mil a RD$20 mil, según sus resultados internacionales. Esta ayuda se une a la que reciben de parte del Círculo Deportivo de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional
SANTO DOMINGO. Cuando el presidente del Comité Olímpico Dominicano (COD) dijo a DL la semana pasada que la histórica actuación criolla en las Olimpíadas que concluyeron ayer, no fue al azar, prácticamente no encontró oposición.
Previo al inicio del máximo evento deportivo global, Luisín Mejía advirtió que, "romper la barrera de las medallas", era la meta y agregó que, "se acabó la era de ir a participar, vamos a competir, no importa cuál sea el resultado, llevamos atletas del primer nivel".
Y la historia le dio la razón. El puesto 46 que ocupó el país en China representa un avance de 10 casillas con respecto a Atenas, donde el oro de Félix Sánchez salvó la participación.
A Beijing, la delegación quisqueyana llevó un menudo de atletas en capacidad de pelear por los metales en disputas.
Sólo Brasil, Cuba, México y Argentina quedaron por encima de Dominicana en el medallero entre los países latinoamericanos. A nivel continental, el país llegó en el octavo puesto. Naciones como Portugal, Irán, India, Suecia, Grecia (que albergó las Olimpíadas en 2004), Israel, Colombia, Chile, Venezuela y Taiwán, tuvieron un rendimiento por debajo al dominicano.
El oro del boxeador superligero (64 kilos) Félix Manuel Díaz Guzmán, primero que en su ficha de manufactura (pasaporte) dice Hecho en República Dominicana, y la plata del taekwondoíne Gabriel Mercedes (58 kilos) es el resultado de una generación de atletas salidos de un sistemas que, aunque genera cuestionamientos, garantiza un trato que dista de los días de concentraciones a semanas de competencias.
Nunca cuatro boxeadores habían avanzado a octavos de final, nunca una pesista había llegado en el quinto lugar, ni una tenimesista había llegado a cuartos de final. De los 25 atletas que llevó el país apenas uno (Mariely Sánchez, atletismo) llegó por invitación, el resto tuvo que ganarse su clasificación.
La promulgación de la Ley 85-99 que crea el Programa de Atletas de Alto Rendimiento, Nuevos Valores e Inmortales (PARNI) y la implementación por parte del ex secretario de Estado de Deportes, César Cedeño (2000-2004), de asignaciones fijas de recursos a las federaciones, dio un giro de 180 grados al deporte aficionado dominicano.
Ambas decisiones han sido tan acertadas que los partidos Revolucionario Dominicano (PRD) y de la Liberación Dominicana (PLD) aprobaron y fortalecieron lo que uno y otro hizo. El presupuesto de Deportes que corre este año superará los RD$2,300 millones, seis veces lo que se invertía en 1998.
Así, las cancelaciones de participaciones en eventos internacionales está reservado para un puñado de federaciones que no terminan de aplicar los principios de la gerencia, pues cada mes reciben asignaciones fijas.
Desde 1999, los atletas dominicanos de alto rendimiento y nuevos valores gozan de alimentación de primera calidad, seguro médico (que incluye a tres familiares), facilidades de estudio, además de alojamiento, puesto que las concentraciones son permanentes. En la actualidad hay 853 atletas activos que gozan de estos privilegios y otros 700 ex deportistas.
Soterio Ramírez, actual director del PARNI, reveló que en los últimos cuatro años este programa ha otorgado 1,048 becas universitarias, ya que estar registrado en un centro de estudios es un requisito para estar en el esquema.
Las medallistas panamericanas Gina María Ruiz (taekwondo), Wanda Rijo (halterofilia) y Heidy Rodríguez (karate) son ejemplos del nuevo sistema. Ninguna de las tres llega a los 30 años, son profesionales y ya abandonaron la actividad.
Los atletas protegidos por el PARNI devengan sueldos que van entre RD$5 mil a RD$20 mil, según sus resultados internacionales. Esta ayuda se une a la que reciben de parte del Círculo Deportivo de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional
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